Pobre maestro, que recibe alumnos cuyos padres festejan que aprendieron a bailar, cantar entre cortado o a comer una manzana y se criaron en ese entorno, con padres y abuelos que suben a los hijos y a los nietos contentos por lo que saben hacer. Pobres niños, se criaron en un entorno donde se festeja más la estupidez que el aprendizaje- Hoy el resultado es que tenemos niños desde los 3 años que comen con el celular al lado, y que si se lo saca, lloran desesperados por lo cual logran que el celular vuelva a sus manos. Niños atontados por el tik tok donde los apasiona ver bailar a alguien, como les enseñaron sus padres o abuelos. A no valorar saber leer, a no valorar la comprensión de un texto, a no valorar que saben hacer cuentas,Hoy, pobres niños y jóvenes que se sienten presionados por que no entienden los vientos ciclónicos ni menos porque estudian los ríos de Asia cuando ni siquiera conocen el rio Vaqueros. Y ahí si empieza a entrar el estado, porque son ellos los que ven la currícula de cada materia, y si no se toman medidas urgentes Milei tendrá razón, para que hacerlos estudiar, si nada sabe. Que estudien del celular con tik tok.
Pobres maestros, desalentador panorama para revertir los resultados PISA